Aquí les voy dando información de nuestro Buenos Aires querido
10 de Diciembre de 2007:
Pasaron 125 días, fuerza!!! solo faltan 1236 más
Cómo analizar una gestión que lo único que realizó fueron catastróficos diagnósticos e informes. Estas fueron apariciones mediáticas denunciando corrupción, negligencia, incumplimientos de los deberes de los funcionarios anteriores pero ninguna denuncia frente a la justicia.
Educación:
Esto no le alcanzó a Macri para hacer, por ejemplo el diagnóstico que presentó el 12 de febrero pasado sobre “critica situación de la infraestructura escolar”. A 13 días hábiles de comenzar el ciclo lectivo Macri hace un diagnóstico!!! Qué hizo durante los 6 meses de transición? Qué hizo su mayoría legislativa desde 2005?
Cualquiera puede acceder a la página oficial del Gobierno de la Ciudad (www.buenosaires.gov.ar) y comprobar que el Jefe de Gobierno sólo adjudicó 31 obras, casi todas ellas de “refacciones menores y pintura”. Ojalá que no las pinte de amarillo patito.
Inundaciones:
Cualquier vecino recordará muchas inundaciones, algunas de ellas records en caída de agua y por supuesto los grandes trastornos que esto ocasiona y ocasionaba. Sin ir más lejos, en febrero de 2001 al propio Ibarra como Jefe de Gobierno le tocó un diluvio de 94mm en 1 ½ hora. Ibarra hizo obras de mitigación de inundaciones, por ejemplo el canal aliviador del Arroyo Vega.
Ahora fue el turno de Macri. El jueves 28/02 en 3 horas cayeron 64mm de agua. La Ciudad colapsada, sin subte y paradójicamente inundándose en zonas que antes no ocurría. Macri empezó a mirar para atrás, y los costados para echar culpas. El domingo 2/03 se volvió a inundar. En el colmo de la estupidez, su Ministro de Justicia y Seguridad Guillermo Montenegro, acusó al Servicio Meteorológico Nacional de no haber dado el “alerta meteorológico”. Una respuesta lacónica llegó desde el director del organismo, Héctor Ciappesoni” y cerró el debate: “por una lluvia de 20mm no tengo que dar un alerta”. El problema fue que Mauricio levantó los operativos que se realizaban antes, durante y después de las tormentas en las calles y sumideros para permitir un rápido escurrimiento. Sin contar a San Pedro, de quién es la culpa?
Salud:
Además de vetar la ley que promovía la creación de un laboratorio estatal para la producción de medicamentos gratuitos, Mauricio que es Macri propuso una idea muy PRO. Los hospitales porteños deberán privilegiar la atención de los domiciliados en la ciudad. Además de ser inconstitucional, de ser impracticable técnicamente y chocar frente al juramento hipocrático que realizan los médicos, la ideota macrista es una canallada discriminatoria. Estaría bueno enseñarle a este empresario un poco de historia argentina y recordarle que Buenos Aires, además de ser la Capital Federal de la República, es una ciudad que construyeron todos los argentinos, incluso a grandes costos históricos.
Despidos:
Para las fiestas Macri intentó despedir 2300 empleados municipales. Según Gabriela Michetti, todos eran ñoquis, guau!!! que puntería macrista. Finalmente, tras un fallo judicial que ordenaba reincorporar a todos y obligar al ejecutivo a censar a los empleados, empezaron de a uno a reconocer que no conocían los despidos. Finalmente Macri no pudo despedir gente, pero se desquitó, la contrató. El nuevo matutino de Jorge Lanata publicó el miércoles 5/03, en tapa, que en apenas 100 días de gestión se contrataron 1471 chicos PRO con sueldos de hasta $6000.
Endeudamiento:
Macri le pidió a la Legislatura porteña que lo autorizara a endeudar la Ciudad en 1600 millones de pesos. El destino de estos fondos lleva el genérico título de “infraestructura social”. Tomar crédito no es malo, a pesar de que la historia no es muy amigable con los políticos conservadores como Macri lo han hecho.
Lo importante sería controlar el destino de estos fondos y que se cumpla lo prometido.
Aunque para nosotros, a pesar de lo odioso, lo inevitable son las comparaciones. Aníbal Ibarra, ultimo integrante de una aventura que se llamo "ALIANZA", gestionó en medio de la peor crisis económica que recuerde nuestro país. No despidió a nadie, no redujo salarios, no aumentó el ABL, y no endeudó la Ciudad. Todas las obras se hicieron con recursos propios y genuinos. En épocas de crecimiento económico, por qué Mauricio nos endeuda, a usted, a mi, a su hijo y al mío?
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Una Mordaza a la Educacion
Distintas áreas administrativas del Gobierno de la Ciudad han emitido disposiciones a fin de que docentes y directivos de los establecimientos educativos no tomen contacto ni con medios de prensa ni con otros establecimientos.
En el primer caso se trata del restablecimiento de una vieja normativa de los periodos militares por la cual se establece que los docentes no pueden formular declaraciones a la prensa sin tener autorización del área de prensa del Gobierno de la Ciudad.
En el segundo caso se trata de una nueva normativa que viene a impedir cualquier movimiento horizontal del personal directivo de las escuelas, los cuales en numerosas ocasiones asisten a reuniones de las Redes sociales barriales con los centros de salud, defensorías barriales, así como a actos escolares y reuniones de pares por proyectos locales o por temáticas de interés pedagógico e institucional común. Obviamente que el personal de los establecimientos debe poner en conocimiento de la “superioridad” es decir de supervisores y directores de área la salida de referencia, y esto es lo habitual y lo que administrativamente corresponde. La circular invierte los términos para impedir toda salida no expresamente solicitada desde la autoridad central en un refuerzo de la autoridad jerárquica y vertical tantas veces cuestionada del sistema educativo tradicional.
Todos quienes valoramos la educación estatal pública y gratuita de nuestra Ciudad alentamos su cada vez mejor funcionamiento, apostamos a un fortalecimiento de las instancias de conducción y al funcionamiento democrático y participativo de la comunidad educativa.
Las medidas mencionadas constituyen un serio retroceso que nos recuerda los terribles años de la “mordaza” y la “inmovilidad” por el miedo a la censura y la represión. Consideramos que Nunca Mas deben existir estos mecanismos de silenciamiento, aún a riesgo de escuchar disensos y criticas a la propia gestión, temas que deben ser absolutamente entendidos por cualquier gobierno democrático.
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La UTE denuncia: El silencio No es salud
El día Jueves 3 de Abril la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) denunció, a través de una conferencia de prensa realizada en la Escuela nº 8 de Recuperación, el avance autoritario de la gestión macrista sobre la educación de la ciudad de Buenos Aires. El paquete de medidas con las que el Gobierno de la Ciudad busca inmovilizar, ocultar y silenciar a las escuelas de la ciudad está conformado por la eliminación de las escasas Jornadas de Organización Institucional con que contaban los docentes porteños, la prohibición de realizar actividades fuera del estableciemiento en horario de clases y la de impedir que los trabajadores de la educación realicen declaraciones a la prensa.
Así, las deficiencias e inequidades del sistema educativo sólo podrán ser conocidas por quienes las padecen.
El secretario gremial de UTE, Eduardo López expresó que “la única funcionalidad de estas medidas es aplicar un disciplinamiento. Hay tanto miedo entre los maestros que nos costó conseguir una escuela para realizar esta actividad, porque hay temor a un sumario que les ponga techo a su carrera. Sin embargo, la hicimos en una escuela (que no nos dejan) y hablando con los medios (que tampoco nos dejan)”.
En la actividad estuvieron presentes el secretario general de UTE Francisco Nenna y la secretaria general de CTERA, Stella Maldonado, quien denunció ante los medios que “la prohibición de hacer declaraciones públicas sobre situaciones que suceden en las escuelas, como los problemas de infraestructura, es nociva para la libertad de expresión. No existen secretos de Estado con relación a estas cuestiones”.
En un comunicado entregado a los medios de comunicación la UTE afirmó “Nuestro modelo educativo no debe estar regido por el miedo ni por la obediencia debida. Los docentes sabemos que la educación es diálogo, comunicación, encuentro y compromiso y que nunca el silencio es salud”.
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Una gestión sin ideas. Falta de propuestas, de claridad y de funcionarios capacitados.
La cultura, talón de Aquiles del gobierno de Macri.
RICARDO SALTON
Columnista de música de NOTICIAS
El gobierno de Mauricio Macri cumplió con los 100 días que suelen tomarse como patrón de medida para conocer e1 rumbo de una gestión. Quizá sea tiempo de hacer una primera apreciación sobre la base de lo hecho, de lo dicho y de lo prometido en materia cultural.
Ya desde la restauración democrática, Buenos Aires venía arrastrando una inercia muy fuerte en el área de cultura. La Ciudad se acostumbró a los talleres barriales, a los megaconciertos de verano, a los varios festivales, a la potenciación de las industrias culturales, a la presencia en ferias internacionales, al intercambio con el sector privado, al estimulo a las distintas ramas del arte, al apoyo de las producciones independientes, etcétera. La cultura estuvo en el centro de la escena, aun para el disenso.
Macri tuvo dificultades desde el arranque. Durante la campaña, el número puesto para cubrir el cargo de ministro parecía ser Ignacio Liprandi, un empresario y coleccionista de arte que llegó a sostener su proyecto a través de un libro – “Cultura. Nuestra PROpuesta” - que él mismo financió y publicó. Finalmente, y mucho antes del cambio de gobierno, su nombre fue vetado y, de la galera, apareció el titiritero y editor Luis Rodríguez Felder. El curioso personaje quedó descartado después de que algunos reportajes expusieran lo disparatado de su plan. Y así resultó, finalmente, el actual ministro, Hernán Lombardi, empresario turístico y propietario hotelero con pocos antecedentes en temas culturales. Con él, se decidió unificar el área con Turismo y romper una larga tradición de la cultura con rasgo ministerial excluyente.
Ex funcionario de los gobiernos municipal y nacional de Fernando De la Rúa, ex integrante del llamado “Grupo Sushi”, y sin equipos propios, Lombardi armó un elenco que tiene toda la impronta de Darío Lopérfido y de Cecilia Felgueras -otros ex De la Rúa que sí conocían muy bien esta área-, con muchos radicales desengañados en su haber.
Lo visto hasta este momento, da cuenta de una gestión cultural estática y con pocas ideas. En el mejor de los casos, con los cambios de funcionarios respectivos, se conservaron actividades que venían desarrollándose con éxito, como el “Buenos Aires Festival Internacional de Cine” BAFICI, que tiene en Sergio Wolf un seguidor del anterior director Fernando Martín Peña. Por lo demás, comparada con lo que venía sucediendo, fue llamativamente pobre la programación de verano. El Festival de Tango resultó movido de su fecha tradicional y trasladado -ahora unificado con el Campeonato Mundial de Baile- para el invierno. El Festival de Jazz también cambió su fecha, y promete reducción del número de conciertos y actividades -y, según afirmó su nuevo director, el pianista Adrián Iales, quizás incluya espectáculos con entrada paga contra la gratuidad anterior-. Nada se ha dicho por el momento de los festivales de percusión y de folclore -que ya habían visto interrumpida su continuidad en el último tramo de la gestión Telerman-, pero ninguno de ellos figuró en el plan que presentó el Ministro a comienzos de año. Han sido eliminados los seminarios de formación en temas de Industria que, con buen tino, ha copiado el gobierno de Scioli. Las nuevas autoridades del teatro Colón, sin sala propia, decidieron suspender la temporada de ópera previamente programada fuera de sede para este año. Los talleres culturales de los barrios han sido reducidos -según decisión declarada por el propio Ministro, en un 60%-, aunque aseguran que no se verá afectado el número de asistentes. Y apenas aparece el programa “No hay ciudad sin poesía”, presentado por estos días -con el que se pretende difundir a grandes autores en espacios públicos-, como una acción de cosecha propia, con el incluido desplante de varios poetas que se negaron públicamente a ser contratados para leer sus obras.
No se percibe ni un concepto claro de hacia dónde está orientada la gestión -Lombardi habla de “construir ciudadanía”, aunque el slogan tiene poco desarrollo y no termina de quedar claro a qué se refiere- ni una dinámica importante; curiosamente, ni siquiera ligada al estimulo del turismo.
A lo mejor, está ocurriendo que el gobierno de Macri, eficientista y pragmático desde su discurso, tiene serias dificultades con los aspectos simbólicos de una ciudad enérgica, vital y fuertemente cultural, como Buenos Aires. A los funcionarios del jefe de Gobierno y al propio Macri les resulta sencillo hablar de licitaciones, kilómetros de túneles, metros cúbicos de hormigón y de asfalto, o de nuevas y bien pagas policías.
Se les hace difícil en cambio -aún al ministro responsable-, entender y sostener una actividad que no es corpórea y que, por lo tanto, no se ve, que no puede medirse en resultados inmediatos y que trasciende inevitablemente el lapso de cualquier gobierno. La cultura ha salido de la agenda por decisión del Gobierno de la Ciudad. Habrá que ver cómo repercute en el mayoritario electorado macrista este posicionamiento frente a una actividad que parecía funcionar relativamente bien.
Pero, en todo caso, ese análisis podrá hacerse cuando hayan ocurrido muchos más que 125 días de gobierno.
Columnista de música de NOTICIAS. Ex coordinador ejecutivo de la Dirección General de Música del Gobierno de la Ciudad.
Nota publicada en la Revista Noticias.
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Discriminación, bien "PRO".
Las afirmaciones ofensivas y discriminatorias de la diputada PROcesista Nora Guinzburg.
Comunicado de la FALGBT.
FEDERACIÓN ARGENTINA DE LESBIANAS, GAYS, BISEXUALES Y TRANS
La diputada nacional del PRO, Nora Guinzburg, ha expresado en una columna de opinión para la revista Veintitrés que “no entiende” por qué lesbianas, gays, bisexuales y trans luchamos por nuestros derechos humanos, por la plena vigencia de la Constitución Nacional, por la no discriminación y por la plena igualdad jurídica.
Según la diputada macrista, somos “una minoría caprichosa”, que no acepta que en las sociedades “gobiernan las mayorías”. Por otra parte, haciendo gala de su profunda ignorancia, la legisladora afirma que “los homosexuales tienen una discapacidad para tener hijos”.
No nos sorprenden estas afirmaciones de una diputada que en 2006 se negó a asistir a la sesión de la Cámara de Diputados de la Nación en la que se repudió el golpe de estado del 24 de marzo de 1976, afirmando que no estaba “obligada a soportar la violencia moral” que dicho repudio le causaba. No nos sorprenden de quien se opuso también a la ley que incluyó en el Código Penal el delito de desaparición forzada de personas. No nos sorprenden de quien fue la única diputada de la comisión de Legislación Penal que votó en contra de la reforma al Código de Justicia Militar que, entre otras importantes reformas, eliminaba las sanciones homofóbicas con las que se condenaba a los militares homosexuales. Según su particular visión de la realidad, dicha reforma era "un paso más en la destrucción de las Fuerzas Armadas".
No nos sorprenden estas declaraciones cuando el Gobierno de la Ciudad avanza en políticas represivas contra nuestra comunidad. En las últimas semanas, hemos sufrido el patoterismo de los inspectores porteños en el centro cultural Casa Brandon y en el Club de Osos de Buenos Aires. En este último caso, dos patrulleros, un Taunus “de civil” de la Policía Federal, un vehículo del GCBA, tres inspectores y siete policías estuvieron durante horas en la puerta de la sede social de esta institución para clausurar una cena de cumpleaños, amenazando con hacer un listado de nombres y documentos para “identificar” a todos los comensales. Esta avanzada ya se había insinuado durante la transición, cuando por primera vez el Gobierno de la Ciudad obstaculizó la realización de la Marcha del Orgullo de Buenos Aires.
En esta ciudad que empieza a no estar buena, las afirmaciones ofensivas de una diputada que ha defendido a la dictadura y pertenece a un partido que se caracteriza por sus acciones discriminatorias no pueden sorprendernos.
Sostener como argumento contra los derechos humanos de una minoría que “en las sociedades gobiernan las mayorías” y que pretender igualdad de derechos es “un capricho” no hace más que transparentar el desprecio por la democracia de la autora de tales afirmaciones. Seguramente Adolf Hitler o los criminales del Ku Klux Klan estarían de acuerdo con las palabras de la diputada, ya que ambos luchaban como ella contra “una minoría caprichosa” que, como nosotros y nosotras, pretendía tener iguales derechos y que se respete su dignidad humana, sin entender que “gobiernan las mayorías” (blanca, católica, heterosexual) y que “hay que saber adaptarse a la realidad”.
¡Cuánta ignorancia, señora diputada! Como bien dice usted, "matrimonio" viene del latín, ‘mater’, que significa madre. Lo que no dice es que ‘monium’ significa gravamen. Esto tiene que ver con una visión del matrimonio que nada tiene que ver con la actual, inclusive en el caso de los matrimonios heterosexuales, en los que ahora la mujer puede elegir quién será su marido y no existe más el pago de la “dote”. Pero si nos guiáramos por la etimología de las palabras, deberíamos negar a las madres la “patria potestad”, que viene de ‘pater’, porque antiguamente era un atributo exclusivo de los hombres. Y sólo los hombres deberían administrar el “patrimonio”, que también viene de ‘pater’, porque la mujer no tenía derechos patrimoniales. Es más, si fuéramos tan estrictos, el “salario” debería pagarse en sal. Sólo una visión sesgada por el afán discriminatorio puede abusar del análisis morfológico para justificar la violación del derecho constitucional de las parejas formadas por personas del mismo sexo a casarse y gozar de la misma protección para sus familias de la que gozan las parejas heterosexuales.
También dice la diputada que pretendemos cosas que no son ni fueron creadas para nosotros y nosotras. Nos preguntamos si también se opone al voto de la mujer, derecho creado para el hombre y del que, gracias a la lucha de muchas mujeres, hoy gozamos todos y todas.
Sin embargo, el colmo del absurdo es la parte en la que la diputada afirma que lesbianas y gays tenemos “una discapacidad para tener hijos”. La señora diputada desconoce la existencia de miles de parejas de gays y lesbianas en todo el mundo que tienen hijos o hijas, naturales o adoptivos. Miles de parejas de gays o lesbianas crían conjuntamente al hijo biológico de uno o una de sus miembros, así como miles de parejas de lesbianas recurren a la inseminación artificial u otros métodos para procrear, sin hablar de quienes recurren a la adopción. En los diferentes países donde el matrimonio entre personas del mismo sexo, la patria potestad compartida de los hijos e hijas y la adopción conjunta son legales, las sociedades han aprendido a convivir con estas familias y los mitos y prejuicios que alimenta desde su profunda ignorancia la señora diputada han desaparecido.
Las personas lesbianas, gays, bisexuales y trans vamos a seguir luchando por nuestros derechos. La Corte Suprema de Justicia de la Nación deberá pronto resolver los recursos de amparo que distintas parejas de gays y lesbianas hemos presentado reclamando la declaración de inconstitucionalidad de la interpretación que se hace de los artículos del Código Civil que supuestamente nos impiden ejercer el derecho al matrimonio. Tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado de la Nación se encuentran pendientes de tratamiento proyectos de ley para reformar dicho código y eliminar los obstáculos inconstitucionales contra el ejercicio de dicho derecho.
Así como ya ha pasado en España, Holanda, Sudáfrica, Bélgica, Canadá, Suecia, algunos estados de los EE.UU., y como pronto sucederá en muchos otros países que están debatiendo reformas a su legislación, tarde o temprano, la Argentina superará estos obstáculos y reconocerá los mismos derechos con los mismos nombres para nuestras parejas. Tiempo después, sin dudas, las prohibiciones actuales serán vistas por nuestra sociedad con la misma extrañeza y vergüenza con las que hoy miramos las épocas de la desigualdad de derechos entre afrodescendientes y blancos, o las absurdas oposiciones al derecho de las mujeres a votar.
Las palabras de la diputada Guinzburg, si alguien todavía las recuerda, estarán en el lugar que la historia les asigna a los personajes más siniestros de la reacción contra el avance democrático y la igualdad entre los seres humanos.
FEDERACIÓN ARGENTINA DE LESBIANAS, GAYS, BISEXUALES Y TRANS
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EL EJECUTIVO QUIERE CONCESIONAR AREAS DE SERVICIOS EN LOS ESPACIOS VERDES PORTEÑOS
Divide al macrismo un proyecto para poner bares en las plazas
La polémica iniciativa generó resistencias entre legisladores del oficialismo y un cerrado rechazo de la oposición. Los diputados no quieren pagar el costo político de quedar como privatizadores de lo público.
Por: Daniel Gutman
El Gobierno de la Ciudad pretende concesionar espacios en las plazas y parques porteños para que allí se instalen bares y áreas de servicios. En el Ejecutivo local dicen que se busca que los espacios verdes sean más atractivos y estén mejor preparados para que la gente los disfrute, sin que dejen de ser espacios públicos, pero el proyecto es tan controvertido que ya originó discusiones dentro del propio macrismo y la oposición cerrada de organizaciones vecinales.
La cesión de terrenos a actores privados dentro de los espacios verdes de la Ciudad está hoy prohibida por dos ordenanzas, que serían explícitamente derogadas.
En la Legislatura, donde la iniciativa fue presentada hace un par de semanas, algunos legisladores oficialistas hicieron saber sus reservas. Advirtieron, en ese sentido, que no quieren pagar el costo político de quedar como privatizadores del espacio público ni exponerse a un debate con la oposición del que pueden salir mal parados. De hecho, el proyecto estaba listo para ser enviado a la Legislatura al menos desde febrero, pero voces influyentes del macrismo en la Legislatura lo frenaron durante un tiempo. Desde que Mauricio Macri asumió el Gobierno de la Ciudad, hace cuatro meses, es el primer proyecto que encuentra resistencias en el propio interior del bloque.
"No queremos privatizar el espacio público. No hay nada más lejos de la realidad. El primer objetivo de este proyecto es regularizar los puestos de comida que existen hoy, que no tienen autorización ni control sobre su higiene. Y el segundo punto es brindar en las plazas pequeñas áreas de refrigerio. El que las opere, como contraprestación, tendría que ocuparse de construir y mantener baños públicos. Se trata de hacer parques y plazas con mejores servicios y prestaciones", dijo a Clarín Juan Pablo Piccardo, ministro de Ambiente y Espacio Público porteño.
Sin embargo, Martín Borrelli, del bloque Pro, dijo a este diario que no está dispuesto a dar su voto al proyecto para que se se den concesiones en todas las plazas de la Ciudad, sino únicamente en los parques de mayor tamaño, como el Tres de Febrero o el Chacabuco. "No creo que sea necesario concesionar servicios en todos los espacios verdes de la Ciudad. Las necesidades están concentradas en las grandes plazas donde acuden masivamente los vecinos y no hay servicios de ningún tipo, en particular, sanitarios. En estos casos, sí, el Estado ha demostrado que no puede garantizar la conservación sustentable y debemos superar un modelo fracasado".
Otros prefieren no hablar públicamente. Clarín intentó contactar a Néstor Abbas y Marta Varela, que también integran el bloque Pro y son miembros de la comisión de Protección y Uso del Espacio Público, donde se está discutiendo el proyecto, pero ambos sugirieron dirigirse a la presidenta de esa comisión, Silvia Majdalani.
Justamente Majdalani, quien elaboró el proyecto junto al ministerio de Espacio Público, reveló que está estudiando algunas modificaciones debido a cuestionamientos recibidos. Como está redactado hoy, el proyecto de ley autoriza al Gobierno "a realizar obras de infraestructura y prestación de servicios, por sí o por terceros, así como dar en concesión equipamiento, para el mejor aprovechamiento de los visitantes de los espacios verdes públicos de acuerdo a lo determinado por la reglamentación".
"Quizás el texto está demasiado abierto y deberíamos precisar un poco más qué se podrá concesionar y qué no. También podríamos incluir una determinación del porcentaje de superficie de las plazas que se podrá concesionar", dijo Majdalani, quien de todas maneras defendió enfáticamente la iniciativa: "No querer que haya servicios en las plazas es ser un retrógrado. Pasa en todas las partes del mundo".
Algunos referentes de la oposición, como el ex jefe de Gobierno, Aníbal Ibarra, y el jefe del bloque kirchnerista, Diego Kravetz, ya se manifestaron en contra, igual que todos los actores que concurrieron a los debates en la comisión, como algunos clubes y distintas asociaciones vecinales de Palermo.
Diario Clarín.
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